«Escribí un guion que a ningún estudio de cine le gustó. Me dijeron que a nadie le gustaba la ciencia ficción, decían que era para niños. Finalmente encontré un productor que dijo que financiaría mi historia, aunque tampoco le gustó mi guion, lo hizo porque quería que le hiciera otras películas en el futuro. Tuve que aceptar un presupuesto que estaba muy por debajo, así que tuve que aceptar reducir mi salario en un 300%, porque creía en mi historia.
Desde el inicio del rodaje la cinta parecía destinada al fracaso, no había artistas que crearan efectos visuales en Hollywood, así que tuve que crear un estudio de efectos especiales, sufrimos fallas electrónicas, accesorios rotos e insultos en los equipos.
Una semana antes del rodaje, el set fue arrasado por una tormenta. No teníamos dinero, usamos lo que encontramos y reutilizamos vestuario de otras cintas. Tuve que luchar todos los días para conseguir las tomas que quería, porque el equipo se negaba trabajar horas extras. Odiaban lo que estábamos filmando. Casi todos los actores estaban convencidos de que sería un completo y total fracaso. Pero me aferré a mi visión, luchando para que los créditos iniciales aparecieran en la pantalla como yo quería que aparecieran. Tuve que pagar una multa y renunciar al gremio de directores. El riesgo de fracasar crecía cada día y estaba al borde de un ataque de nervios. Era introvertido y me costaba expresarme. Nadie pudo ver la magnitud de mi visión.
Odié la primera versión de mi película, porque no estaba a la altura de mi versión original. Así que retrasé el lanzamiento para trabajar más en ello, lo que provocó que el presupuesto creciera un 40 por ciento más. El personaje estrella tuvo un accidente automovilístico, por lo que rehacer las tomas fue imposible.
El estudio de cine no sabía cómo comercializar mi película, así que apenas lo intentaron. El estreno de mi película se estrenó sólo en cinco salas de Estados Unidos el 25 de mayo, que fue el peor día del año para estrenar una película. La voz llegó como la pólvora, era una película extraordinaria. Todos tenían que verlo, todos lo hicieron.
Star Wars se convirtió en el mayor éxito de taquilla de su época. Creó una franquicia que generó miles de millones de dólares y cambió el negocio cinematográfico para siempre. Ha ganado aproximadamente 27 mil millones de dólares en todo el mundo. Recuerda siempre tu enfoque, es el que determina tu realidad»
Cree en tu visión.
CINE CON VALOR MÉXICO 